sábado, 23 de abril de 2011

Acabo de recuperar el gusto por perderme.
Temerosa durante estos años a que si me perdía, no podía responder a lo que el exterior me demandaba, había perdido el gusto por perderme.
Y ahora rememoro lo que era.
Ahora estoy perdida en la música. Mis oidos solo oyen lo que suena en ellos y solo suena música.
Mis ojos ven movimientos, pero mis ojos, ahora mismo no son importantes. Ya lo han sido durante mucho tiempo.
Una sonrisa fuerza a mis labios a cambiar de posición.
Miro pero no escucho y me fuerza la risa.
Que ridiculas me parecen las imagenes cotidianas sin sonido.
Los labios de otros se mueven, sus gestos están hablando pero... yo no escucho. Solo escucho la música que no deja un resquicio en mis tímpanos ni en mi cabeza para otra cosa que no sea ella. Solo Yo.
Que dulcemente egoista es.
Se acabaron las quejas.
Se acabaron los suspiros.
Solo existo yo y la musica que me evoca.
Me evoca que dentro de mí hay más, y los demas que se ocupen de lo demás.
Hay mucho.
Menos que lo tuyo, sin duda.
Mas que lo tuyo, tambien.
Pero eso no es importante. No es un consuelo. No quiero consuelos, los consuelos no ayudan a crecer.

Tratado de las cosas que nos corroen

Azul. Azul marino. Blanco con rayas azules. Rayas azul marino. Azul un poco más claro, pero no celeste.
Pantalones oscuros. Azules. Azul marino casi negro. Quedan bien con cualquier chaqueta.
Rojo. Pero no para la ropa, sino para el corazón.
Azul. Azul como el mono de trabajo de los obreros.
Azul. Como el cielo que ahora alberga el alma.

Azul.
Siempre azul.
De pronto suena una canción, que no tienen nada que ver contigo. Es más, tu nunca la hubieses escuchado... y sin embargo, hay algo en su melodía que me recuerda a ti.
Te veo como en las últimas fotos... sonriendo. Es curioso, no me di cuenta de lo que sonreias en las fotos, hasta que alguien me lo dijo y no recuerdo quien.
Pero sonreías, quizá más en los últimos tiempos. Aunque no creo que fuera de verdad, quiero decir, que eran sonrisas de foto... o no. La verdad, es que en los últimos tiempos tuve que apartarme de ti. Sentimentalmente tuve que apartarme de vosotros, porque un buen día, fuí consciente de cuanto podría sufrir si faltaseis.
Que ilusa!.
No queria sufrir.
Pensé que si me apartaba no sufriría. Pensé que la perspectiva calmaría el sentimiento. Pensé que... siempre pienso demasiado y en contra de lo que muchos puedan pensar, el pensamiento no mitiga el sentimiento. Incluso lo aviva llegado el caso.
Pero sonreías. Sonreias o te reías del mundo, de todos. Tu experiencia era mucha, amplia, nadie alcanzaba a conocerla entera. Creo que llegamos a conocer tan solo una parte.
En 38 años siempre descubrí cosas nuevas en ti. Mejor dicho, siempre me descubrías cosas nuevas, porque partían de ti. De tu vida, de tu forma de vivir la vida.

jueves, 14 de abril de 2011

Sueños de Amor

Las traviesas golondrinas,
bulliciosas habitantes
del nido de la cornisa,
vigilan desde el alero
los dulces y sutiles sueños
que pasean por tu candor.

Que hacen sentirme celoso
como el sol a ti te baña,
que alumbrar tu linda cara
desatando mi ilusión
de contemplarte dormida,
de acariciarte temprano
y estar en tu habitación.

Viajeras golondrinas
las de nidos observadores
cuidad con amor los sueños
del amor de mis amores.
El reposar de ese sueño
es la luz de mi pasión
cuando caida es la noche.

Cuando ya ha caido el sol
para mi es el derroche
en los brazos de mi amor,
viviendo de su contacto
desatando la pasión.
Los sueños de sus encantos
los que vivimos los dos.

JC. 05.05.2010

.

¿Donde?

Me siento tan sola, tan sola.

Dentro y fuera de mi, me siento sola.
No tengo con quien, no puedo con nadie... estoy sola, rodeada de gente que cree ver en mi otra cosa.

El Silencio y mi Yo de dentro son mis únicos compañeros la mayor parte de los días.
Yo escogí o me deje escoger, no lo se, y este es el resultado.
Yo me creí, ilusa de mi, y por culpa de creerme me perdí.


¿Donde estas ahora que ya no puedo verte?
¿Donde buscarte para que me escuches?



Quiero huir y no puedo.
Quiero cambiar y no se.
Quiero ser otra y ya es tarde.



¿Donde estas que no te veo?
¿Donde puedo buscarte para escucharte?
¿Donde lanzar mis preguntas para que regresen con respuestas?
¿Donde estas?.



El exorcismo de las palabras calma mi alma, pero no mi corazón y duele.



Estoy sola.



No soy la que quería ser
No soy la que creí ser
No se quien soy.



Me voy destruyendo disimuladamente, mientras el mundo no se percata
¿Y que le importo yo al mundo?, nada, apenas unos minutos de su tiempo.



Tengo miedo.
Tengo la mitad de mi vida en mis manos y la otra mitad en la espalda.
Pero no me reconozco.
No se que hacer con mis manos.
Me siento tan sola



¿Donde estas que no te veo?
¿Donde estas que pueda hablarte?
No sé donde buscarte.
Que poco hablé cuando pude hacerlo.
Cuanto lamento no haberte hablado más.
Somos iguales, pero tu eras mejor.



Yo no sé. Yo no veo.
Yo solo se que duele.



Solo dime como hacerlo
Llamame por mi nombre una vez más,
Solo para decirme como hacerlo.



Hoy he soñado contigo.
Es el único lugar donde te encuentro
Donde te escucho
Donde te veo
Donde te siento.